cambio de ruta
Cuando uno ha pasado días difíciles, provocados por sentimientos encontrados que te genera una persona que lleva años en tu vida, y que llegado un momento se fue volando a otras latitudes, muchas cosas pasan por la cabeza, y la reflexión se dispara en muchas direcciones...
¿fue mi culpa? ¿era lo que yo quería? ¿se irá para siempre? ... o volverá?...
En fin... la vida continúa y te sigue poniendo situaciones y personas en tu camino que poco a poco hacen que lo pasado realmente quede en el pasado, y comiences a escribir en tu futuro.
Y la verdad es que, mientras sigamos pensando en lo que tuvimos y se fue, nos cerramos muchas veces a otras cosas totalmente nuevas que nos generan sensaciones y emociones apasionantes y extrañamente exitantes.
Así como las olas dejan la costa y nuevas corrientes lleguen a acariciar suavemente las arenas, el corazón deja ir latidos y se enciende con nuevas ondas de emoción que lo hacen estremecerse hasta lo más profundo... y así es...
Por mi parte, he cambiado de rumbo y me dirijo en nuevas direcciones, y si bien es cierto lo que viví no se olvida, y más bien se enriquece, lo nuevo que llega me hace sentir más viva, y me da y me hace sentir emociones que me encantan, que me mueven y le ponen sal y pimienta a mis días...
Ahí vamos, escribiendo nuevas páginas... bon appétit!