andar en la calle=estar en peligro de muerte...

es curioso como la vida nos regala a cada instante oportunidades para reflexionar, y ocasiones para poner a otros a reflexionar... bueno el asunto es el siguiente:
al regresar hoy a mi casa, en el carro con mi familia, en dos ocasiones estuvimos punto de ser víctimas de las imprudencias de otros.

En menos de un km dos personas sin conciencia irrespetaron leyes de tránsito, o al menos de mínima sana convivencia humana en la vía pública, atravesando sus autos o realizando maniobras inadecuadas sin importarles -dados los hechos- lo que podía ocurrir a otros. En la primera ocasión, un fulano señor parqueó, con la mayor parsimonia su vehículo en doble fila, sobre el carril en el que venía, en una vía de un sentido, con autos que venía tras el a una velocidad regular, no puso señal, y tan solo frenó, y luego de bajarse su esposa -quién entró a un negocio a hacer no se que cosa- se dispuso, ALLI, a esperarla. Nosotros veniamos detrás, y dimos un frenazo tremendo, casi le damos por detrás. Los pitazos no se hicieron esperar y el enojo sobró...

Escasos dos o tres minutos luego, sobre la autopista de la entrada a Cartago, un carro se abrió demasiado para virar en U sobre un cruce, sin poner antes la señal, provocando que mi papá se saliera de su carril, alterando el tránsito en el de al lado, seguido todo esto de fuertes pitazos afuera, y enojo y tensión -sin dejar de lado el susto- a lo interno del microambiente, en el cuál muchos de nosotros andamos arriesgando la vida cuando transitamos sobre la vía pública en un vehículo automotor...

No queremos más corazones pintados en las carreteras, por lo que todo el mundo afirma, pero... pero del dicho al hecho, hay mucho trecho...

No queda más que, como dicen por ahí, manejar a la defensiva y con el corazón en la garganta... que vida tan estresada!!!