jueves, julio 20, 2006

recuerdos, de todo tipo



Estoy trabajando en dos lugares. Ambas instituciones privadas, una grande, otra pequeña, una con amplias facilidades, otra con unas cuantas menos, pero en ambas, por igual gratificante: trabajo con niños...

Sé que tal vez a muchos de ellos solo este años los veré como mis alumnos, y eso es algo de lo sacrificado que tiene el ser maestra de preescolar, que por lo general a los niños solo los tienes contigo un año.
Un año en el que debes procurar llenarlos de tu amor, enseñarles todo lo bueno que puedas del mundo, y colaborar con lo más que puedas en la formación de estas personitas como seres útiles a la sociedad.

A través de ya varios años de trabajar en mi campo, de haber conocido más de 1000 sonrisitas diferentes, muchísimos bracitos amorosos a mi alrededor y demasiadas mentecitas ávidas de aprender todo lo que la vida tenga para ofrecerles, me he dado cuenta de que la huella que se puede dejar en una persona al enseñarle, al ser -utilizando en forma correcta el término- su "maestro", es profunda, y dependiendo de cómo se logre interactuar: imborrable!

La mayor esperanza que tengo al ser maestra es lograr que todos esos enanillos me recuerden con cariño, que la imagen de la "teacher" sea algo agradable de recordar.

y viéndolo bien, creo que algo de eso he logrado comprobar, cada vez que voy por la calle y escucho alguna vocecilla blanca que me grita desde la otra acera:

"tiiiiiiiiiiiiiiiiiicheeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeerrr"

7 comentarios:

Cristibel dijo...

Qué tierno... Trabajar con niños es maravilloso. Yo lo hice durante tres meses en un hotel de playa. Lo genial es que nos la pasábamos jugando todo el día, y en la noche me convertía en payaso, muñequita o sencillamente animadora, que es lo que era. Fue muy cansado, pero gratificante. Los niños son geniales. Se aprende tanto de ellos...

Anónimo dijo...

es una gran responsabilidad, pero con ese corazon que vos tenes no creo que te vayan a olvidar!!!
si sos un amor!!!
que Dios te llene de mil bendiciones!!!

zuzurro dijo...

Welcome to the Machine!

yo lo detestaba, lo odiaba, decía eso jamás...

ahora soy niño...

eso me gusta...

sé más de Pokemón que cualquiera de ustedes, y eso es inigualable!

La-Roc dijo...

Los niños tienen una magia tan natural y única... que son la sonrisa de Dios desbordada en la Tierra.

Una profesión donde la vocación es la que hace la diferencia.


Besitos Glas!!! Eres privilegiada, no lo olvides...!

Caperucita dijo...

lo tuyo no solo se llama paciencia, también se llama amor y dedicación.
no lo dudes ni un segundo .. lo tuyo será imborrable.
besos!

alefux dijo...

jejejeje... me siento alegre que te alegres de sentirte alegre en el trabajo... :P

yo simplemente no podría... con mis sobrinos tengo para rato...

Mr. Sag dijo...

Ah... que lindo sentirse bien en el trabajo. Fijo algunos de esos niñitos, mierdositos, guilillas o derivados van a recordarte para el resto de su vida, quien no recuerda sus maestras de escuela o kinder?