mariposas

Hoy pasé la tarde y gran parte de la noche pintando mariposas en las paredes de mi cuarto. Y es que son tan bellas!... al pintarlas una a una con mucho cuidado, recordé cuanto me gustan, cuan mágicas son...

Es clásico el cuadro del niño persiguiendo una mariposa, mientras corre por el campo. Y es que reflejan tanta libertad, tanto encanto, que a veces quisiera ser como una de ellas. Con esa vida tan corta, si, pero tan llena de delicadeza, de vuelos fugaces de flor en flor, de belleza etérea que las hace únicas.

Su fragilidad aparente esconde tanta fortaleza, y son capaces de generar las más bellas imágenes en la mente de los poetas... ¿quién habrá pensado algo desagradable al contemplar el vuelo de una? o quién ha generado ideas asesinas al remembrarlas?...

Alas de mariposa!... tan frágiles pero tan llenas de energía. Con su vuelo mágico son capaces de generar un tsunami al otro lado del globo, y también de capturar las más distraídas miradas... son tantas las veces que he querido ser como una!... para volar, y llegar a donde nunca he llegado; cruzar el cielo y contemplar la puesta del sol, el beso inigualable del astro dorado con las aguas del océano...

Alas de mariposa! mágica tela de encanto místico... porqué me gustan tanto? mil y una razón... que no vale la pena reflexionar. Porqué son así, naturales.

Por ahora, seguiré soñando con mariposas de colores... al contemplar las paredes de mi habitación.

paz.